Visitados por la policia

En estos días que no estaba en la casa, llegó la policía de infancia de menores pidiendo papeles de funcionamiento. Mi hijo no sabia donde estaban, entonces escribió por el Skype, preguntando dónde podía encontrarlos, que si no los presentaba le pondrían un comparendo y como cosa rara no los encontraba. Por más que se le indicó dónde. Nada, él  nunca ve nada.

Más tarde que llego el papá, él si los encontró y al otro día fue y los presentó, sin problemas. Pues todo está en regla, se quedaron con las ganas de multarlo. Sin embargo siempre se llevaron a uno de los jóvenes que estaban jugando por parecer menor de edad.

En realidad son menores de edad, pero según la ley no pueden entrar al establecimiento niños menores de 14 años. Como cosa rara nosotros teníamos la información de que era a partir de los 12. Allá mismo en la oficina de Gobierno, cuando sacamos el permiso de funcionamiento, nos dijeron eso: mayores de 12 y que  no podían entrar uniformados.

Con la visita que nos hicieron recalcaron que la edad era de 14 en adelante. Algo que me pareció raro, aunque las leyes cambian muy seguido. Hoy dicen una cosa y mañana amanecen más desocupados y les da por cambiar lo que dijeron hoy. Así que no es nada raro que eso pase.

Sin embargo, yo quería que se pusieran de acuerdo y todos me dijeran lo mismo, no que la Policía dijera una cosa y el Gobierno diga otra, así que me fui para el cuartel a averiguar, de allá me mandaron para la inspección de infancia y adolescencia, allí el policía me dijo que esa información la daban en el comando.

Hablando en la polícia

El problema es que no se ponen de acuerdo de allá me manda para acá y de acá para allá, ni porque fuera algo tan grave, solo quiero una información, no es cosa del otro mundo. Le decía yo al chico. Y tuvimos la siguiente conversación:

– Bueno, dígame pues qué le paso con su negocio.

– Nada, le dije, es sólo que como fueron cuando yo no estaba pues quiero enterarme de los detalles y por qué tengo una información distorsionada, a ver si todos nos ponemos de acuerdo.

– ¡Ah! pero yo solo fui por papeles del negocio y de que no hubiera menores consumiendo sustancias nocivas, por lo demás aquí no se colocan comparendos por nada más.

– ¡Ah! pero sin embargo siempre se llevaron a un niño porque creyeron que era menor de 14, si este chico no hubiera tenido casi 15, seguro que nos ganamos la multa. Por lo tanto quiero saber en que caso somos acreedores de ella, más que como tenía la información de 12 años, yo  los dejo entrar. Además porque muchas veces son los mismo padres de familia que los llevan y me piden el favor de ponerles cuidado, por poco y puedo poner una guardería.

– Yo no le veo nada de malo que entre a jugar a la luz del día y no escondidos como en otros sitio tenebrosos que encuentras en este pueblo, donde seguramente pueden correr peligro de malas compañías y que sean inducidos a la droga.

– En cambio yo antes los estoy corrigiendo y reprendiendo. Le dije.

– Me parece muy bien, dice el policía, yo tampoco le veo nada de malo a niños mayorcitos, tampoco de 7 u 8, pero ya de 12 en adelante no le veo nada, mas si están a su cuidado, lo que pasa es que como no soy el único que hace las revisiones, de pronto si alguna vez va alguno de los compañeros y le pueden formar problemas, porque la Ley dice una cosa y toca hacerla cumplir, pero si en el palacio le dieron otra información, pues puede ir allá y que le den un papel, para nosotros estar informados.

– Bueno, pues voy  a ir a ver si  ellos ya se actualizaron o qué pasa. Cualquier cosa vengo y le comunico.

De paseo en la oficina de Gobierno

Fui al palacio municipal y no estaba el señor que daba la información y las demás no sabían nada del tema, así que me toco volver en  la tarde y esperar un buen rato a que el señor este terminara con un señor que había llegado antes y estaban haciendo charco.

Al fin cuando ya casi me salían raíces de esperar, me atendió el señor muy amable y le expuse el tema de la edad de los pelados en los videojuegos y él me dice que siempre ha sido de 14.

– Qué raro, le dije, aquí mismo me dijeron de 12 cuando abrí el negocio, o sea que estuve delinquiendo la ley tres años, creyendo que estaba en lo correcto. Así es como le montan las multas a uno, por falta de buena información, pero bueno igual que puede pasar si encuentran a los niños jugando en mi negocio donde no pasa nada raro y están a la vista de todos.

– Me dice: pues por nosotros no pasaría nada, pero si la policía de menores va y encuentra niños menores de 14, si le pueden aplicar la Ley.

– Pero habrán excepciones, si por ejemplo están con personas mayores o con sus padres, allí muchos van con ellos  a jugar.

– Pues no sé , creo que  ni con mayores se puede.

En fin que allí tampoco saben nada, eso de la Ley es para el día que se esté muy de malas, lleguen y la quieran hacer valer o necesiten plata.

Conclusión con las salas de vídeo juego

Lo malo es que en mi negocio tocará dejar entrar a los menores para poderles pagar una multa, porque a este paso no dará ni para sostenerse el negocio ni para ellos.

Yo lo que vi de todo este enredajo es que no saben ni dónde están parado con el tema, pero tocará estar muy pendiente de ellos, pues cuando se alborotan, los que menos tenemos que ver, será los que paguemos los platos rotos. Por que para cosas raras, las habrá, hay negocios de dudosa reputación, pero que mueven dinero a manos llenas, así que ojo vivo y tratar de no dar papaya.

Volví donde el policía de menores y como no estaba le dejé la razón de que si eran mayores de 14. Al menos hice la vuelta y dejé dicho por todas partes mi parecer sobre mi negocio.