Hoy en día conseguirse una chica sin cola que le pise es como encontrar una aguja en un pajar. Qué cosita y no es que sea pecado, pero definitivamente que si son un encarte los enanos ajenos. Más si se va a empezar una relación con otra persona, se debe ser muy maduros y haber criado muy bien al chino-a, para que entienda que otra persona ocupará el lugar del papá o la mamá.
En algunos casos las influencias externas ayudan mucho para que las relaciones no se den, más si los niños se ven con los padres y estos seguramente les hablan mal de las persona con las que están sus parejas. Por lo tanto es comprensible que cuando vuelven de estar con el padre o la madre, lleguen envenenados y sin ganas de saber nada y quién paga los platos rotos es el niño-a, o la pareja en discordia.
Algo que no le pasó a la chica del bebé nuevo, pues a pesar de que tiene un niño de una relación anterior , el niño es muy buen amigo de su pareja y se llevan a las mil maravilla, yo creo que es porque el langaruto del papá no tiene ninguna relación con el niño, así que lo ha criado ella sola y no tiene malas influencias y es muy bien criado y educado y sabe que le conviene estar bien con el chico porque si su mamá está feliz, él también lo será. Por lo tanto la clave como que está en que los hijos tengan la madurez suficiente para entender que si sus padres no pueden vivir juntos, habrá otra persona con la que pueda ser feliz y por ende ellos también salen ganando al tener dos casas en donde jorobar la vida.
Aunque lo mejor sería que no existieran tanto niños de relaciones disueltas, pero es algo inevitable pues parece que los condones, las pastas y tantas formas de evitar traer hijos a este mundo con el primero que se atraviesa, no surten efecto y muchas veces se embarazan a conciencia y prematuramente pensando que de esta forma aseguran al marrano que las mantendrán de por vida, sin caer en cuenta que a las que se embargan de por vida somos nosotras mismas, pues a los hombres les vale huevo ir dejando hijos regados por todas partes y con cada vieja que se acuesten dejar su semilla ahí, para que los tilden de muy machos.
Y algo que no entiendo aún es como es que nos dejamos embarazar no una sino varias veces de la misma chucha, para que sean dobles los problemas al separarse, en fin hay casos y cosas.
Como también hay excepciones, donde los hijos de otras relaciones son tolerante y menos egoístas con sus padres y desean que sean felices, creo que también depende de la edad de los niños, pues no se puede esperar que un niño pequeño reaccione igual a otro que ya entienda las cosas. Conclusión, lo mejor sería esperar que los chicos estén grandes para enredarse con otra relación, pero no se puede perder tiempo, además que a veces entre más grandes más pinga ponen, que complicada se vuelve la vida a veces.