A una amiga le pasó que la bajaron de un dinerito debido a una llamada telefónica, lo curioso es que la llamó dizque un sobrino que hacia más de 20 años no veía. La madre que le paro bolas a un familiar de tan lejanos horizontes y que solamente llame cuando necesitan y en 20 años ni un saludo… Pero como que la cogieron en la hora boba.
Y eso que ya por la televisión habían advertido de estas llamadas raras que están haciendo los ladrones para bajar incautos de algún dinerillo que les sobre por ahí.
Lo raro del asunto es que tiene que ser una persona muy conocida y que le conoce hasta la hora de llegada del colegio, dónde trabaja, pues apenas entraba al medio día la llamaron y la bombardearon por el fijo, por el celular en un desespero que ella no se explica como les hizo la consignación del dinero que tenía para mandarle a sus hijos que están estudiando en otra ciudad. El caso era solventar la urgencia de su sobrino.
Luego cuando se pudo comunicar con el susudicho, él le dijo que en ningún momento la había llamado, pero que tranquila que él la ayudaba a recuperar el dinero con su sueldo y luego le sacó el rabo diciéndole que lo habían echado del trabajo. Me parece que hay gato encerrado.
Y los ladrones cada día se ingenian más maneras diferentes de hacer su trabajo, ahí que ver de las cosas que inventan para sorprendernos, pero me parece bien que renuevan su repertorio, así por lo menos no hay contacto fisico con el asaltante y si están de buenas y dan con alguien que tenga platica mal puesta y dispuesta a darla, pues ni modo. El vivo vive de los bobos y a veces nos cogen con los calzones abajo y nos hacen el mandado.