Con los casos que se ven a diario en las noticias, me dan la razón en la desidia que me da ir donde los médicos, creo que por voluntad propia no será. Otra cosa es que me coga desprevenida y no pueda opinar, por que asi de alegria ir donde ellos, me da rasquilla.
Más que no son nada alentadoras las cifras y estadísticas que se ven, la negligencia de los encargados de que uno no se muera es mucha.
Ayer vi la noticia de una chica jovencita que fue a que le aplicaran una vacuna antitétanica por que se había cortado y la enfermera le coloco anestesia dejando a la pobre como un vegetal, no hay derecho a que sean tan dormidas.
¿Con que confianza se va a estos centros si es de puro milagro que se sale caminando?, de solo pensar en poner mi vida en manos de estos galenos, me da muerte lenta antes de tiempo.
Asi se demande a la clínica, a los médicos, las enfermeras, el daño queda hecho y es irreversible, esta chica no creo que vuelva a ser la alegría de su casa y con un: «perdón me equivoqué», lo quieren arreglar todo. Pero ahi sí, más reversa tiene un avión.
Y eso pasa cuando se está de buenas y atienden a la gente, cuando no es que los dejan morir a la entrada o en las salas de espera por no tener algún seguro o dinero para pagar. Son una belleza.