El sábado fuimos a la viojeteca, ya estaba el amigo allí, y que ahí mismo se nos acerca y se disculpa por lo del otro día, que lo perdonarámos, que fue muy tonto, que no volveria a pasar y eso no sabia ni que hacer. Claro que esas dislculpas me sonaron más falsas que una moneda de cuero, pero igual como se me da lo mismo, ya ni me acordaba de nada, se volvió a sentar ahí con nosotros, pero con tan mala suerte que fueron unas amigas y se sentaron también con nosotros, dejándolo desparchado, mientras bailaba le ocuparon su asiento. Ni modo, nos quedamos sin tan ilustre personaje.
Y encima que la música estaba bien maluquita, cogieron de moda el mezclar ritmos, entonces muchas veces no se sabía ni que se estaba bailando, pues no dejaban terminar un disco para ya oirse otro, seguramente para muchos será lo último en guaracha, pero para mi gusto, vamos en decadencia.
Asi que, eso sí pa que, bailé hasta que se me paró el ombligo, maluco y todo pero le entrada valia igual, había que descontar el gasto. Cuando ya me cansé nos fuímos y dejamos a las chicas en buena compañia, con el care concha 🙂
2 respuestas a «Care concha»
jajajaj pobres mujeres! Seguro les toco pagar todo porque con el tacaño en la mesa jum…
Seguramente.