El 23 de agosto quedé de encontrarme con Marleny, una amiga frivolitera que vive en Baranquilla, coincidimos en Bogotá las dos, entonces quisismos conocernos personalmente, pues otra oportunidad como esta dificil de volverse a presentar.
Entoces habíamos quedado de vernos en un lugar intermedio para las dos, pero a la final toco vernos en la casa de su hijo, donde se está quedando, porque ella no se sabe mover allá. Claro que yo tampoco, pero pienso que los taxis lo llevan a uno a todas partes. Asi que dije que entonces yo iria hasta ella. Me dió la diección y le comente a una chica que estaba en el apartamento y ahí mismo ella me indicó que bus coger para ir. Con un poco de sustico, me dí a la aventura de irme en bus, a pesar de la experiencia reciente,que me hacía dar escaramuza. Pero bueno, me dije: «lo peor que me puede pasar es que me de la vuelta o que al verme más perdida que envolatada, me baje y coja un taxi«, en fin me fuí, hice lo que me dijo de pasar el semáforo, diagonal, coger el bus de tal nombre. Bajarme en una parte, ahi preguntarle a la gente para donde seguía. Gracias a Dios siempre encuentro gente muy amable que me indican el camino. Como también las hay más despistadas que yo, que me indican el lado contrario. Pero mirando, me dí cuenta que no era para ese lado, volvi a preguntarle a otra persona y esta me dice que hacia el lado, que ya había recorrido. Bueno, miro y veo que si tiene razón que las calles van aumentando y tenian que disminuir.
Ya estaba a punto de tirar la toalla y coger un taxi, aunque sabiendo que ya estaba cerquita, pero no daba con los apartamentos, pero con la certeza que iba por el lado correcto, cuando de pronto que veo el edificio que buscaba. Ahí, no más en mis narices, casi que me pica. Pues entré, di mi nombre y ahi mismo me hicieron pasar.
En el segundo piso, me estaba esperando Marleny, que alegría que nos dió, primera vez que me encuentro con alguien que haya conocido virtualmente. Pues que nos abrazamos, nos sentamos a comadrear y a desatrasar el cuaderno, fue genial la velada, conocí a su nieto y a su nuera. Hermoso bebe, de dos hermosos padres.
Intercambiamos regalitos, ella me regaló una naveta importada y un bolsito para echar las costuritas y yo unos aritos. No estaba preparada , pero fué chévere.
Para el regreso llamé a la chica que estaba en el apartamento, para que me dijera que bus cogia para el volver. Con las indicaciones,d evolvi el camino de ida, me parquie al otro lado y espere a que pasara el tal bus. Pues nada que aparecia uno con el nombre que ella me dió, hasta que le pregunte a unas señoras y ellas todas amables me dijeron en cual me podia montar que me dejara a la entrada del condominio y así llegué rápido y sin contra tiempos de nuevo a la casa.
5 respuestas a «Encuentro de lo virtual a la realidad»
Madre estas muy guapa!!!! Un abrazo 🙂 y me encanta que estes tan pila haciendo buenas amistades 🙂
Ahi si, fué mucho lo emocionante ver a mi amiga en persona.
Pero che, venita a la Argentina, te explico como llegar, viajate desde colombia hasta el aeropuerto de Ezeiza(esta a 1 hora de mi casa masomenos),de ahi tomate una combi o un taxi o un remis y venite hasta Ciudad Evita, busca una calle llamada el Benteveo a la altura de El Charrua(no es mi direccion, yo te esperare en esa cuadra), yo te voy a estar esperando con una gorra roja en la cabeza asi me distinguis, dale, chau…
jajajaja, pues no me insistas mucho que en cualquier momentico te puedo caer de sorpresa.
Bueno, en todo caso te esperare.