Cosas que pasan. Me cuentan que en la finca mataron una chucha, es un bicho parecido a una rata, pero más grande. El señor que la mató la iba a enterrar y la echó en una bolsa de basura negra, se puso a andar con la dichosa bolsa y se le olvidó enterrarla en la finca, llevándosela para el pueblo, como tiene moto, la echo en la parrilla y dejó la moto afuera de la tienda, donde entró a comprar alguna cosa, cuando salió, que una señora toda sofocada le tenía la noticia de que se le habían robada la chuspa que tenía en la parrilla que que pesar que se le hubieran robado la carnita. El señor todo chicharachero dijo que si, unos cuantos kilitos de carne que había comprado, pero que ni modo seguro le serviría más al ladrón que a él.
Mientras que a carcajadas se burlaba del ladrón que sin querer queriendo le había quitado de encima la engorrosa tarea de deshacerse del repugnante animal.
Hubiera sido de ataque verle la cara al ladrón cuando destapó la chuspa y ver que no era ninguna carne la que se había robado. Igual de pronto hasta la cocina, vaya uno a saber, como para no perder el empuje.