Vanidad

Anoche que fuí a visitar a mi amiga, en su casa, luego de salir del hospital, llegó a visitarla una chica joven, que caminaba todo rara, toda a doloridad, con que trabajos para saludar y medio sentarse.

Ahí se puso a contar que le practicaron la lipo, que le hicieron y como le subieron las nalgas, por que según la mamá las tenia tan caidas que se tiraba un pedo y se veia el polvero, que risa, ese chiste primera vez que lo oigo.

Entonces se podrán imaginar la charla de estas dos entre cirugias y chuzones, pues la de la señora, más que justificada, casos de salud, pero la de esta chica joven y bonita, me parecio una ociosidad de la vanidad y ya estaba pensando en la próxima para ponerse senos.

Al que le gusta le sabe, y al que quiere marrones, aguanta tirones, por lo menos si le oí decir que dolia, por que algunas dicen eso no duele, pero duela o no, en mi vida creo que me haria esas cosas reconstructivas, si me da miedo una inyección, no me imagino sintiendo chuzos por todas partes.

Luego me vengo pensando como haran para coger con un hilo y alzarles las nalgas y si ese hilo se llega a podrir, se rompe, ¿sera que se vuelven a caer? por que asi como estaba anoche, se le veian muy paradas, muy redondeadas y todo como que bien, con una cinturita de avispa, pero con una faja, que no la dejaba ni respirar, sentia ahogo ajeno.

Que caro se paga por querer verse no se si mejor, las hay que quedan peor, eso no es garantia de mejoria, aparte de quedar con una cantidad de cosas raras dentro del cuerpo que a la postre les puede afectar otras cositas por ahí.

Y justo ahora con las festividades encima, no poderse dar el gustico de la natilla y los buñuelos, una bailadita ni nada, no me crean tan toche, pero bueno, entre gustos no hay disgustos y yo me preocupo por gusto, allá cada quien con sus estravagancias.