Los crímenes pasionales siguen a la orden del día, no siempre es por infidelidad, ahora pasó un caso bien particular. Una mujer se emborrachó, y en medio de su borrachera le pidio un beso y un abrazo a su esposo, y como este no le hizo caso, seguramente por que estaba muy tomada, ella tomo un cuchillo y lo mató.
Claro que como ella reconoció su crimen, de pronto le van a rebajar algunos años, por colaboradora, hago cuentas y definitivamente por docenas sigue siendo más barato. No se justifica el crimen, más por algo tan tonto, sin un motivo aparente, ojala que esto sirva, para mucha gente que toman hasta perder el sentido.
Debe ser muy traumático salir de la laguna que deja el trago y encontrarse siendo una asesina, no me puedo imaginar lo que se puede llegar a sentir. Tiene que ser una rasca muy grande, para cometer un asesinato y no darse cuenta, o en el inconciente lo quería hacer y se escudó en el trago para poder cometer el crimen, sin mucho remordimiento, eso sólo lo sabe ella, el caso es que «sacado el ojo, no hay Santa Lucia que valga«. Lo único cierto es que si no queria esto, le será muy dificil seguir viviendo, asi lo esté pagando, en una cárcel lo días se hacen más lentos, que terrible.