Ayer nos fuimos a llevar a Victor a Armenia, que ya hoy entraba a estudiar, lo dejamos instalado, en su pequeño cuartico, quedó apenas. El matrimonio que le alquiló, muy formal, al frente le queda la universidad, por lo menos le gustan los niños, por que hay dos pequeñas, inquietas como todos los niños, todo es en mancomún, hay que tener muy buenas normas de convivencia para poder vivir así, pero él es capás, se adapta fácil a cualquier situación, eso espero, como todo tiene sus ventanjas y desventajas para mi, no se si para él, pues cada uno miramos las cosas de modo diferente, a mi por lo menos las niñas sería un inconveniente, no me gustan que esten remoliniando, pero a él le encantan los niños, por ahi no le ve problemas, por el momento.
Esperemos que no lo cansen y que tenga hartaaaaaa paciencia, lo único bueno que vi es que la universidad le queda ahí no más, ahhh y que también lo van a alimentar, por lo menos no se tiene que preocupar po la comida, ahi le iré encontrado más ventajas, miraré el lado amable de las cosas, y más que si él esta contento, pues yo también, es lo que importa.
Una respuesta a «El trasteo»
Lo importante es que marque su territorio, porque sino las chinas se van a empezar a propiar de su cuarto, sus cosas y cuando menos piense le toca salir disparado porque se le olvido decir NO, eso es un grave problema, así que hay que ponerle mucho cuidado a la cosa para tener una buena convivencia…