Cuando las cosas no salen como queremos, viene la desilución, la tristeza, no me gusta sentirme triste, es un sentimiento muy feo, se siente como un vacio por dentro, lo mejor es no sentir nada, como se hace para no sentir nada, sera llenando el vacio que queda con algo más, bien complicado, pero se intenta salir adelante como se pueda, no nos podemos quedar en lo que pudo haber sido y no fue, por eso es bueno que lo que hagamos sea con la seguridad de que se hizo lo mejor, a si, si no resulta, se queda con el recuerdo de lo bueno que se vivió, una experiencia más, donde se le saca el mejor partido y si hubo errores, tratar de no volverlos a cometer, todo es un aprendizaje, cada día nos enseña algo, ya depende de cada uno asimilarlo o dejarlo pasar.
Todos los dias tendremos que pasar por muchas desiluciones, pero que estas no nos amargen, al contrario que sea como un aliciente para ser cada dia mejores.