No es lo mismo un pobre enfermo, que un enfermo pobre

A veces cualquier palabrita hace la diferencia entre una y otra cosa, pues uno se pone a ver y ve, que las penas con pan son menos.

No es lo mismo estar enfermo y tener todas las comodidas, todo lo necesario, una buena atención médica, unos buenos cuidados de su familia, que pasar las de canchilas por no tener el dinero suficiente para sobrellevar las penas diarias.

Más en un pueblo como en el que vivo que siempre ponen a la gente a voltear de una ciudad a otra para hacerse cualquier examén o  análisis y que agonia, cualquier salida fuera de la ciudad cuesta un ojo de la cara, más si como casi siempre las personas son de bajos recursos económicos.

Enfermarse en para los ricos, los pobres nos toca dejarnos morir, ya que ni siquiera para salir a otra ciudad se cuenta con dinero suficiente, empezando porque viajar solo es un peligro, si vas a ir donde el médico corres el peligro de salir peor que como entraste. Muchas veces la gente entra caminando, rozagante y sale con las patas por delante, osea que ir al médico no es garantía de salir ileso, al contrario muchas veces le dan el empujoncito para el más allá, mucho más rápido.

Y si fuera que lo mataran a uno pues todavía, pero dejan a las persona como vegetales, incapacitadas y con toda la carga que conlleva tener a un enfermo en la casa. 

En definitiva, hoy amanecí como lúgubre, pero es que se ve cada caso que de sólo pensar en estar en una situación así como que dan ganas de ser el enfermo y no estar al frente del cañón sin balas. Me parece que estas situaciones podrian volver loco a cualquier cuerdo.