Categorías
Opinión

Pelotera en el estadio de Sevilla

La semana pasada sucedió algo nunca visto en todos los años que llevo yendo a caminar al estadio (que ya van siendo 13 años). Aunque siempre hay una primera vez para todo, dicen

Esa mañana llegamos a la misma hora de todos lo días. Dimos varias vueltas y todo normal, cuando de pronto veo a uno de los chicos que cuidan el estadio hablando con dos señoras, pensé que les estaba comunicando algo de interés general.

Así que le pregunté que qué pasaba, a veces pasan la bola de voz a voz, y me dice el chico, «es que la señora no puede estar en el estadio con el niño en su bicicleta».

La señora ya estaba toda alborotada alegando que su hijo que daño le podía hacer al estadio, que solo las estaba acompañando, que esa señora parecía la dueña del estadio, se refería a Berta Oliva la entrenadora de los atletas.

Eso casi se sale de los chiros y el chico muy educadamente le explicaba que él solo cumplía órdenes.

«Bueno, nos vamos para el polideportivo que allá no ponen problemas«. Decía la señora aunque igual seguía peleando.

Nosotras seguimos caminando y pasamos por donde estaban los deportistas con Berta, ellos estaban comentando sobre la señora, yo les dije que la chica ya se iba con su hijo, que ya le habían dicho que no podía estar en el estadio.

Seguimos nuestro paseo y dimos la última vuelta que la damos al revés, al pasar por donde estaba la señora con su hijo seguía alegando y manoteando.

Y empezó a decir la señora: «como a los marihuaneros no le dicen nada, que ella había visto como allí fumaban y que seguramente robaban»

Y nosotros vamos diciendo, pero ellos no entran a fumar en bicicleta. Qué risa, menos mal que no lo dijimos delante de las verduleras porque se nos habría formado la de Troya, pues alcanzamos a ver como las dos señoras seguían alegando con Berta y un señor que. la estaba acompañando lo empezaron a insultar.

Lo estaban empujando y le decían que más fácil se dañaba el estadio con el peso de él que era un gordo seboso que con el triciclo del niño y eso parecían cacatúas.

Berta les decía que si dejaban que ellas estuvieran con el niño en bicicleta, otras madres querrían lo mismo y ya no sería una pista de atletismo si no de bicicletas, que por eso no podía dejarlas.

Además, esta era una pista de atletismo donde por el bien de todos no se permitiía la entrada de bicicletas en la pista, ni pelotas, ni nada de eso cuando estaban los atletas.

Sin embargo las señoras no entendían esta discriminación y seguían empeñadas en defender su derecho a estar en algo que para ellas es público y pueden hacer lo que les plazca.

Pro resulta que no, allí también hay reglas y avisos de lo que se permite y de lo que no.

Al fin salieron pero destilando veneno por donde pasaban, hasta amenazas contra el señor que las echó, madrazos le sobraron y hasta decían de mandarle a dar una pela por metiche, que lo llevaban bien grabada su cara.

Aver si no se enamoran de él, hasta video le hicieron.

Espero que si llegan a poner alguna demanda no amañen el video y se vea cuando ellas lo empujaban e insultaban, aunque ya sabemos cómo son estas cosas.

Fue una mañana diferente llena de malas vibraciones, siempre es desagradable ver estos escándalos.

Lo más triste es que estas señoras le están dando ejemplo a su pequeño de intolerancia y mala convivencia, creerá que todo se soluciona a los golpes y gritos, pobre criatura si es el pan de cada día en su casa.

Y lo mas paradójico es que en la entrada del estadio hay carteles donde dicen las normas para entrar al estadio.

Ahí nos damos cuenta que no leemos o no nos interesa lo que digan, solo nos dejamos llevar por lo que nos convenga.

Ahora han puesto más carteles también para avisar lo de las bicicletas, esperemos que esto no se vuelva pan de cada día, porque daña el buen ambiernte que hay por allí en las mañanas.

Por Amparo Bonilla

Me considero una apasionada de la vida, soy alegre, optimista y siempre encuentro lo bueno de lo malo. Tengo una filosofía de vida que consiste en hacer lo que me gusta, cuando quiero hacerlo y sobre todo sonreír porque la vida serie es muy aburrida...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Por favor lee esto antes de enviar tu comentario. Los datos de carácter personal que me proporciones rellenando este formulario, serán tratados por Amparo Bonilla como responsable de Frivolidades Mafalda. La finalidad es gestionar los comentarios del blog. No se comunicarán los datos a terceros, salvo por obligación legal. Derechos: podrás ejercer tus derechos para rectificar, limitación y suprimir los datos escribiéndome a [email protected]. Puedes consultar la la Política de Privacidad del Blog para mayor información.