Ya todo se anda cayendo, los aviones, los puentes, si se cae uno del suelo ahora no se va a caer un puente viejo.
Al parecer y cuando suceden estas tragedias ahí si se dan cuenta de que le hacia falta reparación, de que estaba mohoso, de que no era apto para tanto trajín, pero mientras tanto si no pasa nada, no hacen tantos aspavientos.
Entonces ahí empiezan las especulaciones, que si no se podían mas de 7 personas, por que pasaron mas de 20, que si el puente estaba mohoso, por que no le echaron aceite, que si no había avisos o que si pero a los turistas no les importo, igual que se pusieron a columpiarse en él sin importan que hubiera niños en el puente colgante.
El caso es que la gente de Villavicencio está pasando por un mal momento.
Se quedaron sin puente y muchas personas se quedaron sin sus seres queridos, pues no debe ser nada agradable ver como el puente se desploma y no poder hacer anda por salvar a las personas que van con uno.
Como un señor que perdió a su esposa y a su dos hijas de 14 y 4 añitos.
Algunos lograron salir bien librados de esta caída, otros no corrieron con tanta suerte y el estrellón fue fatal.
Un chico permaneció colgado casi una hora mientras los socorristas llegaban hasta él.
Y ahí si a buscar culpables. Quién pagara por este desastre.
A los muertos no se les puede culpar por imprudentes. Los niños que quedaron no podían decidir si pasar o no era peligroso.
Entonces toca echarle la culpa a los que construyeron el puente. Porque ¿Cómo se les ocurre construir algo y dejarlo ahí a que se deteriore? Ellos tenían que estar pendientes de que la gente leyera los avisos y que supieran contar hasta 7.
Tenían que estar pendiente de que los jóvenes, chistosos que nunca faltan, no se balancearan de forma irresponsable en el puente para asustar a los que estaban pasando.
Eso si no lo dicen y es mejor echarle la culpa a la vaca a que cada quien responda por lo que cada uno no fue capaz en su momento de hacer.
Nadie quiere responsabilizarse de ser negligentes y querer hacer lo que no está permitido.
Es mas fácil y divertido pasar por alto los avisos que colocan y reírse de las recomendaciones que hacen.
Por lo regular estas tragedias anunciadas pasan por que la gente no para bolas a lo que dicen los expertos o los que están encargados de indicar cómo se debe hacer.
Como los ven humildes y con poncho al hombro, los citadinos se creen con derecho a hacer lo que a ellos les plazca.
Resultando, estas consecuencias fatales.
Igual no era el día para todos, se fueron los que ya tenían el tiquete comprado, ese era el día y así tenia que pasar. Al menos es lo que creo.
Sin embargo queda el mal sabor de boca al saber que son tragedias que se podían evitar. Si tal o cual cosa no se hubiera hecho, algo que nadie sabe dónde le va a tocar.
Y estas cosas seguirán pasando.
Así como los accidentes con los borrachos al volante, por más que sepan que no deben conducir trageados, allá van sin importarle a quien se lleven por delante.
Es que en fin, para la imprudencia humana no hay límites, pero para quejarse luego sí que quieren llevarse a todo el mundo. La triste realidad del mundo en que vivimos :/
11 respuestas a «Se cayó el puente»
Vaya pena!!
Me da mucha rabia que hasta que no pasan las cosas, no damos palo al agua.
Ha sido una tragedia que como dices se podía haber evitado.
Es una pena, Amparo.
Espero de verdad que lo que has escrito se lea y revindiquemos más atención antes de que surjan los accidentes.
Qué razón llevas, Amparo. Es muy fácil buscar culpables después de un desastre en vez de admitir que se sumaron varios factores: falta de mantenimiento, gente haciendo el burro en el puente, llevándolo más al límite… Pero tristemente la previsión, prevención y prudencia suelen brillar por su ausencia hasta que pasa algo grave.
Aquí decimos que «después de visto, todo el mundo es listo», que después de que las desgracias han sucedido, todos se alzan para decir quién tuvo más culpa que otro. Después. Antes, nadie. Hay muchos lugares descuidados en nuestro mundo azul (demasiados), que han sido enviados al exilio y que se encuentran gravemente heridos. Creo que solo una revolución espiritual puede cambiar este tipo de cosas y por espiritual me refiero a descubrir el rumbo de la vida y el sentido del ser humano en ella.
Gracias, Amparo, por recordarnos que cosas así siguen pasando. Un abrazo.
Amparo, en muchísimas ocasiones me pregunto lo mismo cuando ocurre alguna desgracia. ¿Por qué todo el mundo empieza tirar balones fuera? No sería más sencillo asumir lo que se ha hecho, planificado mal, o lo que no se ha prevenido. ¿Y así aprender de nuestros errores e intentar solucionarlo? Siento muchísimo lo ocurrido en Villavicencio, pero espero que algún día nos demos cuenta de nuestras responsabilidades, y también de aceptar que algunas tragedias van a ocurrir, aunque pongamos todos los medios para que no sea así.
¡Muchas gracias por compartirlo con nosotros!
Menudo desastre… muchas veces, por desgracia, hasta que no pasan las cosas no se pone remedio aunque las señales estaban ahí para verlas y prevenir lo que ocurrió. Una vez hay gente muerta, no hay marcha atrás ni se puede arreglar nada, solo evitar que vuelva a ocurrir. Besos!
Que historia tan triste Amparo, la verdad es que rompe nuestro corazón ver que unas personas que simplemente querían pasar un día diferente terminen cambiando su vida por completo, las noticias de los últimos meses nos han movido bastante, porque aunque sean noticias ajenas que pareciera no nos tocan y no nos afectan, pero si nos afectan, rogándole a Dios nunca ser parte de estas horribles noticias que siempre conmocionan y orar por la fortaleza y resignación de las personas que padecen ahora quebranto de salud y tener que despedirse forzadamente de sus seres amados.
Saludos.
¡Que noticia tan triste! siempre me da mucha pena cuando leo cosas así.
Y sin embargo es cierto que sólo cuando hay una desgracia entonces se piensa en que debería haberse hecho tal o cual cosa, pero ya es tarde para las personas que murieron y sus familias. Es muy triste. Los responsables del mantenimiento deberían hacer su trabajo y evitar así que una tragedia como esta se vuelva a repetir
Un abrazo
Creo que este es el post más triste que leo por aquí. Las perdidas humanas no deberían tener justificación, pero cosas de la vida.
Como dices siempre hay que echarle la culpa a alguien esa es parte de nuestra naturaleza.
Saludos.
Hola Amparo,
Es triste que estas cosas sucedan cuando con un mantenimiento adecuado podrían evitarse con relativa facilidad.
Dejando a un lado lo penoso de la noticia, me encanta conocer a través de tus palabras lo que sucede a miles de kilómetros, saber más acerca de esas historias locales que me ofrecen la posibilidad de conocer un poquito más Colombia desde la distancia.
Un abrazo enorme.
Ali
Es muy triste que tengan que pasar estos accidentes para que de verdad hagan algo por mejorar carreteras, puentes y lo que se necesita para que las cosas funcionen como tiene que ser. Es lo que hay en el mundo, ni más ni menos 😀
Ya no se ve el video D:
Y bueno, hay muchos comentarios al respecto entorno a la situación, tanto por la imprudencia de la gente, el valemadrismo de otros, la responsabilidad de quien mando a construir dicho puente, en fin, creo que muchos tendríamos parte de culpa 🙁
Cosas de la vida, es muy triste ver que gente muera en accidentes como estos.