Anoche que salimos a bailar pillé a varios personajes mal estacionados y lo más curioso es que apenas me vieron se les vio la bobada, como si yo fuera de una a contarles a sus parejas que ellos andaban por ahí de pipi contentos, ni por que fuera intima de ellas. De uno de ellos ni el saludo y la otra pues casi vecina, pero tampoco sé como viven como para ir con chismes, que tal que los susodicho estén por allá con el consentimiento de ellas y pase uno por metiche, a lo mejor se arma un problema sin necesidad, así que calladita me veo más bonita.
De todas maneras no deja uno de sentirse incómodo, no porque me importe, sino por lo que puedan pensar ellos, de lo que este pensando yo. Me imagino, pues al entrar estaban en una actitud muy diferente a como adoptaron luego de verme llegar, entonces no se deja de especular si llegamos a dañarles el parche.
Y lo curioso es que el sitio estaba casi en tinieblas, como para ir con el tinieblo ni más ni menos, se veía todo intimo y recogido, para parejitas así clandestinas. No vi casi nadie conocido aparte de ellos, que se les ve en las viejotecas con sus parejas. Deben de ser de los que piensa que para que llevar leña pal monte y si en estos sitios pueden escoger leña a su antojo.
Y como cosa rara llegamos a poner el desorden, pues si estaban muy acaramelados escuchando solo musiquita y besitos por aquí y por allí, pues nosotros llegamos pidiendo música de baile , que para caramelos y dulces la casa es mejor o ir con el otro porque con el mismo no sabe igual.
Así que música de baile, intercambiada con musiquita suave, estuvo chevere el ambiente y los chicos se relajaron y resultaron con más personas que a lo último no se sabía si estaban en plan de parche o solo con amigos. Despistaron al enemigo, si habían espías no se sabría informar en forma que pasaba allí. Así que por mi parte si los vi, ni me acuerdo.
Pero en todo caso que ni me pregunten sino quieren saber, quedarían muy mal informadas. Menos mal que las chicas en cuestión no deben saber que yo andaba por los mismos sitios que sus queridos. Esto me hizo acordar de un día, hace muchos años ya, que mi marido andaba con una chica en una discoteca y una amiga me fue a contar que lo había visto con otra. Entonces yo que me las pillaba todas, cuando ellos iban yo venía, le voy diciendo a la amiga que yo ya sabia, que ellos iban vestidos de tal manera, casi que me pidieron permiso, y ahora que lo dice le dije que también había visto a su marido con una chica la semana pasada y no solo esa vez varias ya, quedándose la amiga de una pieza, pues todo se imaginaba menos que yo le fuera a salir con el contraataque. Me imagino que también lo sabrá, pues en este pueblito todo se sabe. Pero me dice: «No, no lo sabía como se le ocurre que me voy a aguantar algo así, de una le pondré los puntos sobre las ies al malnacido ese». Ups, bueno pues a ver si se ajuician estos chicos o nos tocará hacer lo mismo que ellos para que se nos quite el coraje, por mi parte me dijo la amiga, si me doy cuenta que sigue con la fulana esa que se olvide de mi, que tal, jum pues hasta el momento siguen juntos. Pero le tocó llevárselo para el otro lado, para separarlo de su querida, vaya a saber si viven bueno o de aguante o solo por no dar el brazo a torcer y darse el lujo de quedarse con el trofeo.
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