Con la cantidad de personas quemadas con ácidos, hace algunos meses estaban cocinando la idea de poner unas penas respetables para los que cogieran infraganti, pero como cosa rara la justicia no solo cojea sino que se hace la mensa y va dejando las cosas así sobre el tapete y dispendiosamente se van olvidando de que que tenían ese cuento pendiente. Hasta que de pronto sucede otra tragedia peor que las anteriores que los saca del marasmo en que viven y se acuerdan de que tenían un asuntico por ahí pendiente por resolver.
Y eso sucede cuando las víctimas son personas conocidas e influyentes que revuelcan todo lo que sea necesario para que les paren bolas. Por que del resto a las otras víctimas, como son personas del común que a nadie le importe ni tienen influencias, solo de pasadita dan la noticia. Otra víctima de ácido y pare de contar, quedando los familiares y las propias víctimas en el limbo del olvido y la impunidad.
Pero en estos días la víctima fue una chica joven, bonita y con padres reconocidos. Lo que obviamente sacudió a toda la sociedad y a la justicia que se pusieron trucha y vieron la necesidad de desempolvar los expedientes que descansaban hacia más de 9 meses en su poder sin ser resuelto. Por poquito y les nace el chiquito y claro ahí si están hablando de las penas que les darán a estas personas que ataquen a otras con ácidos. Apenas lo están considerando un atentado mortal contra sus víctimas, que a pesar de que no las maten pues es casi peor dejarlas vivas, ya que quedan deformes para siempre, con su vida social, familiar, laboral acabadas, pues ya no son vistas con agrado y por más que las quieran reconstruir, los seguros no cubren estas operaciones por considerarlas estéticas.
Pero la tapa que colmó el vaso en estos días fue la muerte de un joven, debido a unos ácidos que le arrojaron. Ahí si se motivaron con mayor razón a poner penas medio altas para estos degenerados sin escrúpulos y hasta recompensas para las personas que sepan algo de ellos están ofreciendo.
Al menos ya pusieron la cuota que faltaba para que se sacudan y se den cuenta de que si pueden matar a la gente a punto de ácidos corrosivos y sustancias extrañas, si eso era lo que faltaba para que movieran el rabo. Ahí lo tienen y no fue una mujer, lo cual quiere decir que todos por igual estamos en constante peligro de que si miramos feo a alguien nos responda tirando algo más que un polvo mal echado.
2 respuestas a «La cuota que faltaba»
No puedo creer esas noticias sobre ese tema… Que triste y que miedo que te pase una cosa de esas… ¿De verdad hay personas tan poco tolerantes? Triste 🙂
Las hay a montones, es una pena que solucionen las cosas de esta forma tan bàrbara.