Llamé a mi amiga a ver como seguia de la operación, resulta que se le complicó un poco y la tienen hospitalizada, no sabe hasta cuando, que triste, cómo me deprimen los hospitales, de solo oirlos nombrar ya me dan ganas de llorar, me da la impresión que ahí se sufre mucho, pues si se está enfermo se sufre, eso por descontado, claro que hay personas muy guapas para estos trotes, ya estar en operaciones, con médicos es de lo más normal, yo si le tengo pánico a esos señores, los evito lo más que pueda.
No solo los hospitales, las cárceles, los cementerios, sanatorios, todo lo que tenga que ver con el deterioro humano, me deprime, me da tristeza de los que estan allí, impotencia de no poderlos ayudar, es algo desagradable, una sensación como que me oprime el pecho, que maluco.
Por eso me considero mala amiga, pues dicen que en las desgracias es donde se conoce a los verdaderos amigos, pero no es que no me de pesar que alguién conocido esté en estos sitios y no irlos a ver, es que me deprime demasiado, entonces en vez de darles consuelo o una palabra de aliento, los voy achicopalar más de lo seguramente están, así no aguanta, mejor seguiré siendo muy mala amiga.
6 respuestas a «Mala amiga»
Comparto el sentimiento. Solo entrar al hospital y sentir el ambiente me resulta devastador…
jaja. Fisica y psiquicamente. Los evito lo mas que puedo.
somos dos malos amigos, jajaja
Me uno, aunque la verdad siempre hago acto de presencia (las pocas veces que me ha tocado), así luego termine deprimida en casa 😀
mientras no se llore encima del paciente.
Terrible, es terrible entrar en esos sitios, y en varios de los que mencionas, da tristeza, depresión, del hospital solo el olor me da de todo :S
dimelo a mi, que el nuevo de mi pueblo, ni lo conozco.