Menos mal que aqui todo es en bajada y rápido se evacua el agua, ya estaba subiendo un poquito, se me alcanzó a entrar por debajo de la puerta, goteras que no existían se destapan, hasta mi cama se estaba mojando un poco, lo bueno es que cuando llueve muy fuerte, escampa rápido.
Si eso es en ese lapso de tiempo, mínimo 20 minutos de agua y parece la hora llegada, no me puedo poner en los zapatos de los inundados, que ven como sus casas y pertenencias, van desapareciendo bajo el agua, sin nada que hacer.
De pronto me asaltó un pensamiento, por que será que la guerrilla no se inunda, sería super, verlos salir con sus rifles arriba, huyendo de las inundaciones, los derrumbes, parece que tuvieran pacto con el diablo, que nunca les pasa nada, por lo menos, que nos demos cuenta, parece que donde ellos viven es a prueba de toda clase de calamidades, ni por que sus mansiones fueran muy bien construidas.
Sería muy chistoso que el Gobierno también los tuviera que ayudar por damnificados, pero nada que suenan ni truenan, aunque a veces si salen de sus madrigueras a ver como hacen para fregar más a los que están llevados, en estos días, hubo un derrumbe y en vez de ayudar o por lo menos, mucho ayuda el que no estorba, empezaron a hostigar a la pobre gente que no se podía mover, quedando sin poder ni avanzar ni retroceder, entre la espada y la pared.