Categorías
Cosas que pasan

Jugando con fuego

Muchas veces se piensa que determinada cosa no traerá consecuencias futuras, pero resulta que el que juega con fuego, puede salir quemado, pasa muy a menudo y a casi todos, en algún momento de la vida nos puede pasar.

La cosa es que como los conquistadores españoles salieron de España y llegaron a Africa, donde las condiciones de vida son muy diferentes, en todos los sentidos, especialmente para las mujeres, donde son tratadas poco menos que animales por los hombres, entonces ven llegar a los extranjeros con sus pintas de extraterrestres y si alguno se muestrta amable, pues caen redonditas y ellos son adorados como dioses.

La historia que me ocupa es algo contado por el mismo autor de algo que él mismo se siente culpable, pues al momento de pisar tierra africana y enredarse con una nativa de allí, no pensó que al nomento de la separación, a ella le fuera a dar tan duro y el sufre por verla a ella sufrir, no es grato saberse responsable del sufrimiento de alguién más.

Pero claro, es algo de esperarse después de convivir con una persona unos meses, que la traten bien, la ayuden economicamente, saber que esa persona retorna y que ya no la volverá a ver más, posiblemente, entra el desespero de lo que se puede perder, creo que más afectivamente, que en lo economico, pues si toda la vida no han tenido nada, volver a lo mismo, puede ser normal, pero el afecto es algo que no se puede reemplazar.

Es dificil opinar cuando no se ha pasado por algo ni parecido, pero se puede sentir la angustia existencial que un hecho así puede causar. Si todos pensaramos, antes de actuar, muchas cosas se podrian evitar, pero desafortunadamente los hombres se dejan regir por las hormonas, ¿será que las mujeres también? puede pasar pero a ellos se les nota más.

Aunque como buena consejera, le dije que sino hubiera sido él, pudo ser otro, que por lo menos con él conocio el lado amable de la vida, le quedan gratos recuerdos, pudo haber sido peor, lo hace sentir mal, pensar que se aprovechó de ella, de su cuerpo, pues no tenia nada más que ofrecer, a lo cual me parece que en una relación de dos, si se pasa rico, los dos se benefician, se aprovechan mutuamente, pero igual da tristeza la separación, pues entonces que se la lleve con él y le ponga casa chica, tampoco, por que su familia está primero, ahi sí pues no se, se me acaban los argumentos, pero todo pasará, luego no será más que un triste recuerdo o algo grato, dependiendo de como lo hayan vivido y en que términos queden.

Viendo estas cosas, me acordé por que, cuando era joven no tuve novios, y era que siempre pensaba en ellos, no pensaba que ellos me fueran a terminar a mi, sino que como haría para terminar con ellos, si ya no me gustaban, entonces para evitar ese trago amargo, nunca tuve novios.

Por Amparo Bonilla

Me considero una apasionada de la vida, soy alegre, optimista y siempre encuentro lo bueno de lo malo. Tengo una filosofía de vida que consiste en hacer lo que me gusta, cuando quiero hacerlo y sobre todo sonreír porque la vida serie es muy aburrida...

2 respuestas a «Jugando con fuego»

Ya sé por qué yo también pensaba en como echarlos…. Gracias madre….

Por lo menos a mi me toco en una época dónde existía el teléfono, uhhhh eche a más de uno por allí, me imagino si ahora tuviera novios, los echaría por e-mail o por medio de un twit jajajaja

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Por favor lee esto antes de enviar tu comentario. Los datos de carácter personal que me proporciones rellenando este formulario, serán tratados por Amparo Bonilla como responsable de Frivolidades Mafalda. La finalidad es gestionar los comentarios del blog. No se comunicarán los datos a terceros, salvo por obligación legal. Derechos: podrás ejercer tus derechos para rectificar, limitación y suprimir los datos escribiéndome a [email protected]. Puedes consultar la la Política de Privacidad del Blog para mayor información.