Cuando se oyen noticias de esta magnitud, la verdad es que no hay palabras para describir cosas tan horribles, uno no se explica como en Colombia pueden pasar hechos tan deprimentes y de dementes, por que solamente una mente enferma puede ocasionar actos tan aberrantes.
Ni siquiera las hienas hacen esto con sus propios hijos, es increíble, no cabe en la cabeza de nadie que un padre mande a matar a su hijo y luego salga por la televisión tan campante pidiendo que no le hagan nada al niño, cuando él bien sabe que ya esta muerto.
No tiene perdón de Dios, es que ni con la pena máxima puede pagar lo hecho, no hay castigo suficiente. De nada valen las marchas, ni las protestas, ni nada que se haga, mientras que hallan sueltas tantas personas de mala entraña.
Que futuro se le está brindando a la niñez, al futuro del mañana, si ni siquiera en los propios padres o familiares se puede confiar. Es muy triste que estas cosas le estén pasando a criaturas inocentes que no tienen como defenderse de sus agresores.