Un día después de llegar a Liubliana salimos en la mañana a comprar el pan para el desayuno, pero antes dimos una larga caminata y llegamos hasta el castillo, pasamos por fuera y dejamos para entrar luego con Jaime, ya que él aún estaba durmiendo.
Al parecer todo quedaba cerca del apartamento que alquilamos con Airbnb, le dimos la vuelta al parque compramos frutas en el mercado que habia en la plaza, al parecer los sábados salen las personas que cultivan cerca a vender sus productos directamente y son productos frescos y de buena calidad.
Sin saber el idioma de ellos, Diana se hacia entender para comprar lo que necesitamos, la gente muy amable nos ofrecían sus productos y una señora nos regalo algo de ñapa, como la raíz del perejil, un bulbo todo raro, qué risa.
En la tarde salimos a caminar por la ciudad pasando por el puente de los dragones. Son 4 dragones, uno en cada esquina.
Luego entramos a una catedral rosada lo más de agradable donde terminamos explorando todo y casi nos toca chuparnos unos rezos, pero nos escaqueamos, al fin y al cabo no entendíamos nada.
Después nos fuimos cerca de un puente, donde habia una chica que tocaba el violín y estaba el piso tapizado con alfombra roja, se ve que hay mucho ambiente en las noches a pesar del frio que ya se empieza a sentir por ser otoño.
El día domingo nos fuimos para un parque inmenso que hay en las afueras de la ciudad. Hicimos picnic en el pasto y luego nos fuimos a andar alrededor.
Un parque bonito con muchos matices de verde, vimos un árbol que tenia unas nalgas bien formadas, en la parte de delante no se ve nada, era largo y plano, toca mirarlo por detrás para verle la forma tan bonita que tiene.
Luego pegamos una buena patoneada, nos reímos tomando fotos y luego para la casa de nuevo.
El lunes fue el último día de excursión. Subimos al castillo, almorzamos en las afueras y luego entramos a explorar dentro. No pagamos la entrada, pues no sabíamos si eran entrada libre o solo para los turistas o pagaba el que quisiera.
No había nadie controlando el paso, el caso es que hicimos el recorrido esperando que en cualquier momento nos cobraran o dijeran algo, pero no pasó nada, tampoco había mucho para ver así que nos hubiera salido caro si hubiesemos desembolsado 😀
En los alrededores del castillo había unos estantes con libros, una especie de caseticas donde la gente que sube se sienta, los lee y vuelve a dejarlos allí.
También había unas estatuas de unos estrucos que se me parecieron, un jardín bien cuidado y unas vistas preciosas de la ciudad, se da un paseo ecológico bien bonito en las afueras del castillo.
Despues del castillo bajamos por un camino que no habíamos andado y salimos a una callecita toda simpática y nos fuimos por ahí cuando Jaime alcanza a ver unos cuadros todos bonitos y un señor que estaba pintando. Le llamó la atencion por que eran cuadros con cuarzos y distintas piedras que el señor les colocaba segun veía la necesidad y el color de lo que estaba pintando y como no, nosotras tambien entramos y el señor muy amable se puso a conversar con Diana y a explicarle a Jaime algo de las obras que hacia.
Fue muy divertido y el señor muy amable dejo que le tomaran fotos a sus obras y a él con ellos y hasta una foto se tomo con todos desde su celular. Diana quedo de hacer un articulo en su blog hablando de sus pinturas, ya veremos cuándo lo tendrá listo y Jaime se hizo amigo de él por Facebook.
Por ultimo entramos a la catedral y estuvimos en el final de la misa, muy bonita también y lo mejor de todo era escuchar el organo en vivo, precioso.
Eso sí, los frescos pintados eran muy sanguinarios, pues reflejaban toda la violencia de cuando los romanos mataban a los cristianos, me pareció muy crudas estas imagenes, menos mal que estaban arriba en el techo o bóveda, toca mirar hacia a rriba para verlas, una obra de arte muy bien pintada.
Las puertas de esta catedral eran como en hierro con imagenes incrustadas, bien pesadas si eran. De ahí nos fuimos para el apartamento, hicimos algo de comer y nos preparamos porque al otro día salíamos temprano para nuestro destino final: Venecia (al fin).
22 respuestas a «Conociendo Liubliana. Viajando a Venecia tercera parada»
que bonito el lugar, me ha dado un aire a Berna que estuve este verano y me pareció increíblemente hermoso. Nunca me he hospedado con airbnb me da cierto miedo… que tal la experiencia? un saludo
Los que tienen experiencia en airbnb son mis compañeros de viaje, pero lo que yo vi fue muy bueno en todos los lugares donde nos hospedamos, no tengo queja de nada, la pase muy bien en todos los sitios.
¡Hola Amparo! Que bonito! Vos sabes que Venecia es uno de los lugares que quiero conocer. Espero algun dia poder hacerlo 🙂
Liubliana ni siquiera sabia que existia. Pero que lindo lugar! Me encantaria poder pasar por ese castillo que mencionas y ver la estanteria de libros. Me encanta! Y todos los lugares que mencionas me parecieron interesantes. El tema de las pinturas es genial porque ademas de ser arte, representa la cultura de ese ambito.
Gracias por compartir la experiencia! Besos
Desde luego nos has mostrado una cara de Venecia poco vista y que sólo el viajero trotamundos puede encontrar, encontrando a su paso maravillosos tesoros como los cuadros con cuarzos que seguro fueron un regalo para la vista inesperado. Gracias por acercarnos tierras lejanas y permitirnos viajar contigo!
Que bonito Amparo. Conozco Venecia pero no conozco Liubliana. La verdad es que me ha gustado mucho lo que nos has enseñado y contado pues casi siempre nos limitamos a ver lo típico dejándonos cosas preciosas atrás. Gracias por este recorrido.
Me ha parecido un post muy original. Había entendido que Liubliana era de Venecia y pensé que sería un barrio, así que esperaba góndolas, calles inundadas, canales, puentes, máscaras de carnaval…. pero no, he conocido algo muy diferente 😀
Parece un viaje muy bonito, y que os den comida de la tierra pinta maravilloso.
Que envidia más sana me das!
El pueblo es precioso! Las estatuas, los castillos, los parques… no hay nada que me desagrade! La verdad es que es bastante graciosa la anécdota que nos cuentas, el hombre fue muy majo. Como bien comenta la compañera de arriba muchas veces solo vamos a ver lo «más importante» y por culpa de eso nos dejamos lugares tan bonitos como el que nos presentas. Espero poder tener la oportunidad de viajar a Liubliana 🙂
Un besazo preciosa!
Sí que he estado en Venecia pero no se me ocurrió hacer esta parada de por medio. No es un sitio que tenga en mente visitar, pero se aprecia un ambiente muy tranquilo por lo que cuentas, y alguna que otra cosa interesante para visitar. Lo de los libros aquí no duraría, más de uno se los llevaría a casa… Bss.
Qué post más bonito y personal sobre Liubiana, la cual no conozco pero me han entrado muchas ganas con tu descripción. Así que se me apunto el destino a mi larga lista… Ay lo que me falta es tiempo. Y mira que es delito porque tenemos tan cerca de España a Vencia.
¡Gracias por compartir!
Hermosas fotos, tendré que ahorrar para visitar me ha encantado. Me alegro que no disfrutaras. Nos leemos.
Te he leído sin parar y con mucho gusto he conocido un poquito de este lugar. Me parece increíble. Tengo pendiente conocer tantos lugares… voy a agregar a la lista Liubliana, desde el nombre está lindo! Me gusta mucho tu forma de escribir, te felicito.
No conozco y me da como una tusita en el corazón leer este post jaja, pero que chevere que puedas vivir estas experiencias y poder compartirlas aquí. Es como si viajáramos contigo y conociéramos un poquito del mundo a traves de ti. Saludos y Dios te bendiga.
Waoo estuviste en Venecia y por lo visto te fue fenomen que envidia pero de la buena. Yo deseo ir a venecia en un futuro.
Que bonito lugar Venecia!!! Me encantaría algun dia visitarlo.Liubliana por lo que cuentas parece un lugar mágico.Un beso y gracias por tu aportación
Italia es una maravilla como país. Tiene unos rincones de sueño que dificilmente encuentras en otros lugares. Me encanta las fotos que pusiste, se os ve la cara relajada y de disfrutar totalmente de ese relax. Me alegro de que lo hayáis disfrutado, que envidia me dais. Amo Italia con toda mi alma, así que gracias por acercarme a sitios que no sabía de ellos. Besotes
Hola Amparo, no conocía el sitio (y eso que he ido a Italia y volveré pronto) y desde luego el lugar tiene pinta de ser un sitio precioso que merece la pena visitar y conocer. El arte en las iglesias y catedrales a menudo es más violento de lo que la gente se imagina, el tipo de frescos que dices que te impactaron son habituales en determinados periodos históricos.
Las vistas desde el castillo espectaculares, un sitio pequeño, sencillo y con pinta de ser muy acogedor. Me alegro que disfrutaras de tu estancia allí.
Un abrazo.
El lugar luce realmente asombroso realmente me dieron ganas de estar ahi :). El paisaje tan hogareño y cerca de un ambiente natural es hermoso. Que gusto que disfrutaras tanto el viaje.
Hola guapa!!
Que bonito Venecia!! me ha encantado las fotos del reportaje. No sabía que hubiera que pagar para entrar en el Castillo, la verdad que a mi me hubiera pasado lo mismo, es que es dificil estar en un sitio que no entiendes el idioma, aunque según nos has contado la gente súper maja que te ofrecían cosas y eso es muy importante. Un beso.
Que bonito lugar, me encantaría conocer Venecia un día, es algo pendiente que tengo!
Las fotos están preciosas! Se nota que la has pasado de maravilla, gracias por compartirnos tu experiencia!
Saludos bella!
Qué bello lugar, se me hizo muy agradable y especie de déjà vu ya que leí un libro de ficción llamado Liubliana de Eduardo Sánchez Rugeles y la portada es el dragón de la foto que compartes. Gracias por compartir esta experiencia, espero algún día visitarlo ♥ Besos
Hola Amparo,
me encantó tu post y como has reflejado todo lo que has vivido. Así como las imágenes expuestas en el.
Sin duda Venecia es un destino que muchos desean, yo, una de ellas. 😀 Pero tomo como referencia todos los post en los que habléis de ello para ir así, menos a ciegas y disfrutar al máximo tanto como vosotros habéis hecho sin duda.
Un abrazo
Se siente muy bien en Liubliana, es pequeña pero agradable con una paz increible.