En estos días una amiga que vive en otra ciudad, me llamó a contarme que su suegra se había caído de alguna parte y que se había descuadernado un poquito, quería que yo fuera y le diera una vueltica a ver como seguía y que le había pasado en realidad. Quedé de ir en esos días, días que se convirtieron es semanas, meses, pero eso si cada 8 días los domingos me acordaba de ella, solo que me surgía algún inconveniente y nunca fui, hasta que ella misma le tocó pasar a visitarme y a mostrarme lo descalabrada que había quedado de una caída de 4 metros, mientras yo creía que si acaso había metido la pata en una tabla de su casa, pues no, el accidente fue en otra parte y me enteré de primera mano de lo acontecido.
Resulta que ella trabaja limpiando casas algunos días a la semana y en una de esas casas la mandaron a limpiar unos vidrios en la azotea. Ella no se explica donde piso y el caso es que se cayó desde las alturas, ahí si no estuvo el Ángel de la Guarda para pararla y fue a dar con todos sus huesitoa al duro piso que la recibió amorosamente y un filo en la cabeza le abrió la tusta, quedando medio muerta.
Ella dice que no se dio cuenta de nada, que cuando despertó estaba en un hospital, en otra cuidad y con dolor en todo el esqueleto, de milagro quedó para contar el cuento.
Quedó inmovilizada varios días sin poderse valer por ella misma, todo se lo tenían que hacer. Menos mal que los patrones tienen de donde mirar, sino no me explico como harían para estar en esos trotes de estar viajando a otra ciudad a las terapias, exámenes y todo lo necesario para su rehabilitación, ya que al principio pura carrera particular, pues no aguantaba estar incomoda en un bus.
A estos señores el chistecito les ha salido un ojo de la cara, a veces por ahorrarse unos pesos y por no pagarle a alguien que haga los trabajos pesados y por creer que consiguen a una persona y tiene que ser la todera o la soyla que hago de todo, ahí están encartados y quien sabe hasta cuando, pues a pesar de llevar mas de dos meses del accidente la amiga todavía no ha aterrizado del todo a la tierra y anda muy descuadrada aún.
Quedé de ir a visitarla un domingo de estos, espero que para cuando vaya se encuentre perfectamente bien, lo más seguro, siempre me demoro algunos días y como el tiempo está volando…